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Instrumentos y disciplinas para abordar el problema criminal.

 Si bien no hay más de un método para cualquier ciencia sino el científco, lo demás son técnicas las cuales articulan el método según el objeto de estudio; así se emplea el método científico al crimen, la técnica será jurídica, psicológica u otra, la esencia no cambia y se mantiene la observación, descripión , clasificación, experimentación, hipótesis y conclusión, especializada en la investigación criminal, con una variedad de técnicas tales como: 

 Método científico: este cuenta con una adecuada distribución de las partes de un problema, mediante cuestionamientos acerca del fenómeno de interés, suele dividirse en distintas partes: 

> Observación: es aproximarse al objeto que se va a estudiar, esto mediante un minucioso análisis de partes.
> Descripción: una narravita de aquellas características observadas. 
> Hipótesis: planteamiento de una propuesta de solución. Se procura tener respuesta a: ¿Qué factores llevan a realizar una conducta criminal? ¿Cómo sucedió? ¿Dónde sucedió? ¿Cuándo sucedió? ¿Con qué se realizó? ¿Por qué una persona la comete? ¿Quién la realizó?
No se pueden realizar experimentos con la conducta violenta, pero se cuenta con un laboratorio natural, el cual es la sociedad. 
> Formulación de explicaciones es con referencia a las causas que llevaron al sujeto a cometer un delito. 

 Método inductivo: Según dicta Guillén (2013) "Puede concerbirse como un esquema de razonamientos que parte de fenómenos particulares y, a partir de estos, llega a hipótesis generales que le permiten proyectar un juicio universal" (pág. 4). Parte del sujeto como objeto de estudio, donde se revisan sus caracteríticas, ya sea que proyectó el crimen desde un enfoque jurídico, como presunto delito o desde la psicología y psiquiatría, al estudiar un caso individual. 

Método deductivo: desde conocimientos generales, se adoptan al caso particular, así, teniendo una variedad de estudios sobre un tema en concreto, busca adaptarse al caso necesario; por ejemplo, teniendo los códigos penales o manuales diagnósticos, se aplican en las necesidades individuales. Este método se entiende como el acto de extraer; por ello, de ese cuerpo de conocimientos generales, se aplican a contextos particulares (Prieto, 2017).

 Técnica Clínica: se deriva de los estudios clínicos realizados en psicología, medicina, psiquiatría, criminología clínica, trabajo social clínico y demás. Para conocer el comportamiento de los sujetos violentadores, ya sea en un sistema penitenciario, durante terapia, entrevista, diagnóstico, interrogatorio u otros. Si se está en un medio carcelario, es primordial conocer la percepción sobre los hechos criminales de las personas, si lo canalizan como algo normal, así como la dinámica en el ejercer el acto (Arbach, et. al., 2017).

 Método Histórico: al estudiar un sujeto, hay interés por las causas que lo llevaron a ser criminal. Se busca mirar al pasado e ir detectando las fases que atravesó hasta llegar a un punto donde no se contuvo y dio origen a su comportamiento violento. Mediante este método, se debe buscar y conectar las razones individuales o sociales, así como hechos circundantes (Delgado, 2010). Se mira al pasado sobre la conducta del presente, para pronosticar al futuro.

 Técnica de Exploración: son estudios sobre animales y su agresividad, esto se emplea como comparativo con los humanos, con el fin de encontrar similitudes cerebrales o estímulos externos, para descubrir los componentes biológicos de las diferentes manifestaciones agresivas, las cuales pueden conducir a un conocimiento de las personas en su predeterminación hacia la violencia. 

 Método Sociológico: las teorías sociológicas para la criminalidad ofrecen un amplio espectro a la explicación de la violencia a nivel colectivo (Briceño-León, 2016). Se han generado teorías (etiquetamiento, conflicto, estructural funcionalismo y ventanas rotas). En este método es importante el involucramiento del investigador en el fenómeno, donde partiendo de sus conocimientos, podrá interpretar lo observado.

 Método Estadístico: Young y Veldman señalan que “los procedimientos estadísticos son de particular importancia en las ciencias de la conducta por la necesidad de reducir y desglosar datos” (1986, p. 13). Reúne las cifras de delitos captadas mediante denuncias en diferentes espacios: instituciones, llamadas telefónicas, solicitud directa a la policía, percepciones a los ciudadanos. Con ellas, se pueden conocer datos de una localidad, tasas mensuales y anuales (Palma, 2012).

 Cuestionario: se emplea para obtener información específica de las personas, diagnósticos de inseguridad, víctimas, presupuestos participativos, opinión en temas relevantes, aborto, consumo de drogas, entre otros temas; todo esto con la facilidad del uso de las computadoras, agiliza la recolección de datos. El cuestionario puede ser de preguntas cerradas, abiertas o combinadas, en la primera opción.

 Encuestas de Victimización: esta técnica permite a los administradores de gobierno, conocer acerca de los delitos que no se han denunciado o continuado hasta la etapa de resolución, pero además de cifras ocultas de delitos, también dan un panorama sobre las modalidades en las que se presentó el hecho, sitios donde ocurrió, horarios, características de las personas, víctimas, entre otras. 

La adaptación del método científico a un fenómeno particular el cual lleva a un proceso de aplicación de la generalidad a lo específico, que luego dará como resultado un sistema especializado para el estudio de fenómenos del mismo género, por otro lado, los métodos y técnicas de otras áreas del conocimiento, aportan información de alta relevancia a la comprensión de la violencia.  
     


Sábado 29 de Agosto del 2020 . Wael Sarwat Hikal Carreón.


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